Lo innovador es que siendo un juego de bazas se juega de manera cooperativa de 3 a 5 jugadores (aunque hay reglas también para jugar a 2) en la que hay que ir cumpliendo las misiones por orden hasta un total de 50 y al ser cooperativo o todos ganan o todos pierden.
Divertido, nada tonto y muy bien implementado el que haya que ir cumpliendo esas misiones sin poder hablar durante la ronda y solamente con la posibilidad de comunicarse con una ficha que indica que una de nuestras cartas es la mayor, la menor o la única que tenemos de ese palo o color.
El juego ha causado bastante revuelo con premio y todo incluido. Hay muchas misiones y me ha gustado bastante, también porque a mí me gustan los juegos de bazas tipo tute.