Kodama es un juego de mesa que en España ha sido editado por Devir. Su mecánica consiste en ir formando un árbol desde la carta inicial del tronco y al unirle diferentes ramas.
Se podría definir como la construcción de un puzzle en el que los elementos que hay en las cartas (oruga, estrella, nube, seta, luciérnaga o flores) suman puntos si conseguimos darle continuidad a través de nuestra construcción ramal. Además hay tres estaciones con sus determinadas características y cartas de kodamas (o espíritus del bosque) que también puntúan si cumplimos sus necesidades.
Con bonitas ilustraciones, se trata de un juego sencillo en que no hay mucha interacción entre los jugadores (de 2 a 4) y tal vez algo infantil en su concepción por esa falta de competitividad entre los rivales. Lo que más me gusta es ver como quedan al final de la partida cada uno de los árboles construidos.
Este juego tiene la particularidad de que es el primero que juego después de dos años y el primero que me compro después de tres años. Durante ese tiempo no he jugado a juegos de mesa, mis circunstancias personales eran otros y no me planteaba ni jugarlos y mucho menos comprarlos. Con Kodama vuelvo a las tiendas madrileñas de juegos de mesa y retomo mi afición que, a partir de ahora, va a cambiar poco a poco.